Ahora ha llegado el turno del melón, en esta oportunidad nos hemos centrado en una fruta que debido a su gran cantidad de agua, tiene una gran función hidratante y es tan apetecible en los calurosos meses veraniegos. Por ello, hablamos de los beneficios del melón.
Es una fruta que apetece, ya que al hidratarte, el melón, después de una comida de verano, te refresca. Para tu suerte existen diversas formas de encontrarlo y consumirlo, hay muchas formas de tomarla o de combinarla, que se puede comer desde un primer plato (el típico melón con jamón) hasta la clásica rodaja de melón, un postre que viene muy bien después de una comida y tiene pocas calorías (unas 35 kcal cada 100 gramos).
Así mismo, el melón conserva unas propiedades únicas, tales como antioxidantes e hidratantes. El melón es una planta de la familia de las cucurbitáceas (al igual que el pepino, por lo que es una verdura y no una fruta para muchos) y tiene otras propiedades interesantes ya que también ayuda a prevenir el envejecimiento del el organismo.
El melón ayuda a eliminar toxinas del organismo, ya que al tener gran cantidad de agua en su composición (cerca del 93%), es un alimento ideal para aquellas personas que retienen líquidos. Por lo tanto, esta fruta tiene propiedades diuréticas y una gran cantidad de minerales y vitaminas , así como un bajo nivel de azúcar en su composición. Por lo que si eres diabético o tienes problemas de obesidad, el melón es ideal para ayudar a combatirlos.
Gracias a la aportación de la vitamina B3, el melón cuida la firmeza de la piel y puede ayudar a templar los nervios. Así que ya sabes, no olvides incluir el melón en tu dieta, pues se trata de un alimento muy completo.
Fuente: http://hierbamedicinal.es
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