Da la casualidad que por lo general ellos ya saben que estás planeando tu boda cuando te llaman y aquí hay dos razones: una nada más te hablan para alborotarte la mente o dos, porque en verdad sienten algo por ti y el saber que te casas le hizo querer hacer su luchita.
Y pueden pasar dos cosas en ti, que te valga o que te muevan el tapete, en el primero de los casos todo es bien fácil porque lo mandas a la porra y asunto arreglado, pero tienes que contárselo a tu novio; el detalle viene a ser importante cuando te mueven el tapete aquí lo importa es que:
1. No mientas. Jamás le mientas a tu pareja, dile la verdad en cuanto a tus sentimientos.
2. Pon en orden tus ideas. Trata de reconocer si en realidad es un sentimiento real o solo es un recuerdo de algo bonito que tuviste en tu vida, pero recuerda porque terminaste con esa persona, con el tiempo lo malo se olvida y lo bueno sobresale, así que mejor recordar cuales fueron los motivos del rompimiento y no dejarte llevar.
3. ¿Amor o emoción? Piensa que siempre es bueno gustarle a alguien, pero si estas escogiendo casarte es porque solo te importara gustarle a tu esposo entonces los demás no cuentan, una llamada o una visita de algo que por alguna razón no fue, no debe tener fuerza suficiente para opacar el amor que sientes por tu pareja.
4. Las segundas partes... Recuerda que las segundas partes nunca fueron mejores así que ni para que perder el tiempo.
5. ¿Y si fuera al revés? Piensa también en tu novio y que a ti no te gustaría que el este pensando en su ex a unos meses de tu boda verdad?
Pero si aun así piensas que las cosas no están claras y que tienes un sentimiento que no te deja en paz entonces has un alto en el camino, aléjate de ambos, piensa bien las cosas y decide.
Pero por favor ten en mente que lo que se rompe por algo así es difícil de reparar, así que analiza bien las cosas, no vale la pena perder lo más por lo menos.
Fuente:
http://www.nosotros2.com
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