El magnesio es un elemento esencial en numerosas reacciones enzimáticas. Está presente en todas aquellas en las cuales participan diferentes nucleótidos y en las catalizadas por pirofosfatasas. Ello se debe a su tendencia a asociarse con polifosfatos.
Este nutriente es un catión predominantemente intracelular; su concentración dentro de la célula es diez o más veces mayor que la existente en plasma. Esta desigual distribución es comparable con la del potasio.
La concentración normal en plasma sanguíneo es de 1,5 a 3 mg por dl; el 30 por ciento de esa cantidad se encuentra unido a proteínas y el resto, al estado iónico. Al parecer, la hormona paratiroidea y la aldosterona participan en el control de la magnasemia.
Los requerimientos de magnesio se calculan en 350 mg por día para el varón adulto y 300 mg por día para la mujer. Durante el período de embarazo y lactancia se aconseja una ingesta de 450 mg por día.
El magnesio es constituyente de la clorofila, de modo que se encuentra en buena cantidad en los vegetales verdes. Otros alimentos vegetales, como cereales enteros, porotos, nuces, soja, son adecuadas fuentes de este elemento.
Publicar un comentario