Los fosfatos se encuentran ampliamente distribuidos en los alimentos. Se absorben en el yeyuno e íleon.Los alimentos ricos en calcio generalmente poseen también una buena parte de fosfato. La leche y el queso son buenas fuentes de fósforo. Los porotos, cereales, huevos, pescados y carnes contienen fosfatos. En las verduras y cereales enteros, el fosfato suele encontrarse como fitatos (sales de ácido fítico). El ácido fítico es el hexafosfato de inositol y forma con el calcio un fitato insoluble, no absorbible. La ingestión exagerada de antiácidos interfiere la absorción de fosfatos en la dieta.
Para asegurar una absorción adecuada de calcio y fosfatos, la cantidad de ambos en la dieta debe guardar cierta proporción. Si el fósforo supera al calcio, se favorece la formación de fosfatos insolubles y la pérdida de calcio con las heces.Podrían recomendarse para el fósforo las mismas cantidades indicadas en las necesidades de calcio: 800 mg por día en el adulto; 350 a 800 mg en el niño, aumentando progresivamente de 0 a 10 años; 1200 mg en adolescentes, embarazadas y madres lactantes.
Fuente:
Publicar un comentario