La soledad se sienta a mi lado y empieza a burlarse de mi, me incita a hacerme el amor una y otra vez para demostrarme que siempre será ella en verdad, mi única compañera y que estará conmigo hasta que mi alma abandone mi cuerpo, me recuerda todas las veces que he intentando vencerla en vano, que con el paso de los años aún no entiendo que entregarlo todo a un amor, solo me lleva a regresar con ella, inevitablemente.
El viento mueve mi cabello y me hace recordar cuando tus manos jugaban en él, me susurra tu nombre continuamente hasta hacerme caer en llanto, se cuela entre mis ropas para imitar la sensación de tus caricias en mi piel, me abraza hasta hacerme temblar, pero no de emoción como cuando tu lo hacías, sino del frío que siento por no tenerte cerca, y va y viene, en un vaivén que me hace de a poco perder la calma.
El sol se esconde de mi, las nubes negras se pasean por sobre mi cabeza, ya no hay arcoíris, ya no hay emoción, ya no hay ganas de salir de la cama, quisiera dormir y dormir y no despertar más nunca, me está doliendo tanto tu ausencia que ya no sé como sobrevivir a ella, mis ropas están roídas como rota tengo el alma, no sé en que momento te metiste tanto en mi hasta el punto de ya no poder estar sin ti.
La lluvia moja mi cabeza y se mete en mis pensamientos, va bajando de gota en gota hasta mi corazón inundándolo en llanto, mis ojos están secos e hinchados de tanto que te he llorado, mi garganta se inflama de tanto gritarte sin que me escuches, mis manos caen cansadas al costado de mi cuerpo, sangrando de tanto apretarlas por la frustración de no poder abrazarte, me estoy muriendo de a poco, mi amor… te amo tanto..
BR
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