como de la primavera
son las flores que nacen
y del otoño las hojas
que resecas y rojas
el viento se lleva.
Dime que eres tan mío
como lo son del alba
los luceros que madrugan
para iluminar el cielo
y de la noche las estrellas
que alumbran mis sueños.
Dime que eres tan mío
en tu cuerpo y en tu alma,
tan mío como yo te quiero,
tanto como tú me lo ofreciste
sin que yo te lo pidiera,
en aquella tibia tarde de estío.
María Elena Astorquiza V.
Publicar un comentario