Cuando somos pequeños y no tenemos tanta información en la mente, estamos más abiertos a idealizar y a jugar con los pensamientos. En la edad adulta, este juego se va limitando al razonamiento de lo que vamos experimentado en el momento. De esta manera vamos proyectando los pensamientos según sea el lugar donde nos encontremos.
Ya sabemos que nuestros pensamientos son los que crean nuestra realidad y debido a esto es que toman la mayor relevancia cuando queremos cambiar algo que nos está resultando doloroso o complicado. La mayoría de las personas se deja envolver por la situación donde se encuentra y olvida que tiene acceso a modificar sus pensamientos de tal manea de re-crear lo que está experimentando.
Cuando queremos mejorar algún aspecto de nuestra vida, ésta actividad de gobernar los pensamientos se hace increíblemente importante. Sin esta actividad, será difícil generar los cambios. Si observamos una realidad que resulta triste y seguimos entreteniendo pensamientos de tristeza, ésta seguirá presente en nuestra vida hasta que podamos dejar de pensar en ella.
Si en medio de esa tristeza dejamos lugar a pensamientos de esperanza, la tristeza puede hacer su retirada más rápidamente.
Lo mismo sucede si mantenemos pensamientos de escasez queriendo alcanzar más prosperidad. Para conseguir salir de un estado de escasez, habrá que incorporar pensamientos de apertura a nuevas posibilidades, a otras alternativas. Habrá que buscar la manera de entretener pensamientos de nuevos escenarios para poder generar los cambios que deseamos.
Observa tus pensamientos y decide que buscarás la forma de modificarlos, para que esa modificación genere los cambios en tu realidad.
Sé que este proceso no puede ser tan radical. No es posible pasar de sentirse mal a sentirse lleno de esperanza y posibilidades magnificas en un solo paso. Pero puedes comenzar por tomar consciencia de tus pensamientos, darte cuenta si te están haciendo feliz o te están haciendo sentir desdichado. Luego podrás sorprenderte al hacer la transmutación de ellos.
Tu vida depende del grado de control tengas sobre tus pensamientos. Estos son los que gobiernan tus acciones y tus acciones generaran tus resultados. Por eso tienen tanta importancia.
Espero que este artículo te pueda ayudar a recuperar el mando sobre tus pensamientos y si necesitas una ayudita, puedes ubicarme en este enlace.
Patricia González
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