La pérdida de pareja actualmente se encuentra catalogada entre las tres pérdidas más profundas que experimenta en su vida todo ser humano.
La primera pérdida que se tiene catalogada en este puesto, es la de un hijo, la segunda pérdida es la de los padres en edad temprana y la tercera es la pérdida de la pareja.
Por eso, esta pérdida se iguala en magnitud a las dos situaciones anteriores, ya que la pérdida se constituye como un proceso desagradable y desgastante, incluso más que una muerte, ya que se genera el sentimiento doloroso de que la persona amada vive felizmente sin la presencia de la persona que aún la sigue amando. Por lo tanto, la evasión ante este dolor nos hace vulnerables a construir otras realidades para superar el hecho de que la persona amada ya no se encuentra disponible para nosotros y, como consecuencia, se genera un dolor profundo que impide confiar y ver hacia un nuevo futuro ya que el pasado siempre se encuentra obstaculizando la línea del presente.
Es por esta razón que he decidido platicar y abordar este tema de forma detallada para reconocer si usted se encuentra atrapado en el proceso de pérdida de su ex pareja, llevándolo paso a paso, no solo a reconocerlo, sino a encarar esta realidad y superarla.
A continuación detallaré algunos síntomas emocionales que podrían ayudarnos a detectar si existe algún estancamiento en alguna etapa del proceso de separación, ya que la pérdida es un proceso que está constituido de diferentes etapas pero se deben vivir en un tiempo establecido, siendo el objetivo más importante determinar si se evidencia algún bloqueo.
Como primer punto tenemos la etapa de la negación: en un determinado tiempo es normal estar en negación, con negación me refiero al hecho de estar en evasión para no querer ver una situación que se vuelve más evidente día a día, la cual dará como resultado una evidente separación. Como ejemplo podemos mencionar la negación sobre la infidelidad en la que la persona ha vivido con su pareja por bastante tiempo y no se había dado cuenta "en apariencia" porque no quiere entrar en estado de consciencia pues teme perder la relación y le teme al abandono.
En cuanto a este caso, el problema no es sentir el dolor, sino quedarse estancado permanentemente en alguna etapa, habiendo comprobado que la pareja le está siendo infiel y seguir aceptando el vivir con ese dolor y esa angustia sin poder efectuar ningún cambio, ya que el factor más importante para la persona es no perder a su pareja.
Puede volverse más grave aún cuando la otra parte decide abandonar la relación y decírselo a su pareja. En este momento las personas que se resisten a no perder a su pareja, pueden caer en crisis emocionales de diferentes magnitudes que van desde la evasión, la resistencia total, la angustia, la depresión y se pueden adoptar actitudes que van desde el exteriorizar odio, hasta un deseo ilimitado de venganza y una constante obsesión y persecución.
Como podemos observar, se presentan mecanismos inconscientes complejos y dolorosos. En el próximo artículo seguiré comentando sobre las otras etapas que experimenta una persona cuando se encuentra en el proceso de pérdida.
Vivian Solis
Psicología Clínica experta en Medicina Alternativa Master en Programación Neurolingüística
Psicoterapia y terapia especializada en Cromoterapia energética de Inglaterra, esencias de Bach, Andreas, Bush, y esencias para sanar emociones a nivel embrionario.
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