En todas las familias llega el duro momento en el cual algún miembro de la misma, abuelos, tíos, etc. fallecen por enfermedad o por otros motivos. Los padres se enfrentan a un gran reto; cómo explicar a nuestros hijos esta desaparición y en que términos.
Explicar la muerte de un familiar a un niño es un reto, ya que la concepción de la muerte es algo que se va desarrollando en los niños conforme van avanzando en edad. Es en la edad escolar cuando ya empiezan a entender que la muerte es para siempre. Pero, antes de esta edad, el niño no entiende que es para siempre.
El cómo deben actuar los padres en estas situaciones puede ser complejo. El consejo fundamental que damos es que sean naturales, que enseñen a sus hijos que la muerte es un proceso natural parte de la vida y que todo lo que vemos, plantas, animales y personas pasan por ello.
La naturalidad con el niño
Seguro que son momentos de mucho dolor para los padres, ya que han perdido un familiar muy querido. Sin embargo, si queremos ayudar realmente a los que tenemos mas cerca y que aún viven, como son nuestros hijos -que además están bajo nuestra responsabilidad- tenemos que sobreponernos.
Nuestros hijos tienen que ver naturalidad y sobriedad por nuestra parte para que puedan entender que el proceso de la muerte es algo normal y natural en todo ser vivo. Es importante explicar la muerte a los niños en términos que puedan entender y siendo sinceros con ellos, de tal forma que puedan comprender poco a poco esta parte natural de la vida.
Explica ejemplos de la naturaleza para que el niño pueda entenderlo. Por ejemplo, la flor que se marchita, la mascota que murió por enfermedad de forma que igualmente pasa entre los seres humanos.
Es evidente que no tendrás todas las respuestas a lo que los niños te pregunten. No tengas miedo en compartir tu falta de conocimiento con respecto a preguntas como a dónde van las personas que mueren. Estas respuestas se las responderá nuestro propio hijo dentro del terreno de las creencias personales que él irá adquiriendo. Como padre, puedes compartir tu creencia sobre lo que hay después de la muerte, pero el pequeño debe de tener claro que es tu creencia personal y no una verdad absoluta.
Lo realmente importante es que acepten con naturalidad y duelo la muerte a su alrededor cuando suceda.
El comportamiento de los padres ante la muerte
Una vez mas, esta situación es una excelente oportunidad para que los padres puedan servir de ejemplo a sus hijos con un comportamiento ejemplar de su parte.
Si se pueden evitar situaciones familiares en las que el niño pueda ver a gente desesperada, llorando, mejor. Pero sí es bueno que otros familiares y conocidos puedan corroborar lo que los padres le han dicho de una forma natural.
En definitiva, no mentir al niño sobre la muerte, ser naturales y usar términos que el niño conozca y ejemplos que le puedan aclarar lo que ha pasado dentro de nuestra propia incomprensión del suceso de la muerte y no tener miedo tampoco de transmitir nuestra falta de conocimiento sobre lo que hay después de la muerte.
Cuéntanos tú cómo abordas el tema de la muerte en los más chicos.
Fuente: Entre Padres
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