Los celos pueden definirse como un temor intenso a perder al ser amado y un afán incontrolable de posesión sobre el otro, lo cual hace que la persona que los siente se considere incapaz de conservar a su pareja, creyendo que su propio atractivo y personalidad no es suficiente. De esta manera, se ejerce algún tipo de control sobre el otro para evitar que traicione o deje de amar, cuando lo que en realidad se logra es que la relación se desgaste demasiado. Los celos en casos extremos pueden llegar a la violencia.
Es importante tomar en cuenta que detrás de una persona celosa puede existir una baja autoestima, que nos hace pensar que no valemos lo suficiente, que en cualquier momento puede aparecer una tercera persona con mejores cualidades que nosotros y nos arrebate a nuestra pareja. También puede existir la experiencia previa de traiciones por parejas anteriores o incluso por nuestra pareja actual, por lo que revivimos constantemente aquel momento en donde se nos traicionó con otra persona y nos preguntamos "si me pasó una vez, ¿por qué no me puede pasar otra?"
Frente a esta situación vale la pena hacer un alto y recapacitar en el daño que podemos estar haciéndonos a nosotros mismos y a nuestra pareja si no somos capaces de averiguar de una vez por todas cómo controlar los celos. Algunas de las opciones a seguir son las siguientes:
- Lo primero, antes de montar una escena de celos, es darle la oportunidad a su pareja de que se exprese y explique, pues al estar invadido por los celos es posible que una situación inofensiva parezca totalmente lo contrario. Al darle al otro la oportunidad de explicarse será más fácil diferenciar los hechos reales de lo que puede estar manipulando la imaginación.
- Evite pensamientos destructivos, que hacen que el problema de los celos se agrave, e intente sustituirlos por otros de seguridad y confianza que ayuden a frenarlos. Por ejemplo, en lugar de pensar "Mi pareja me está engañando; me dijo que estaría en la oficina y me dicen que no ha llegado, ¿con quién andará?, lo ideal sería sustituir este pensamiento negativo con uno positivo, por ejemplo "Seguramente mi pareja tuvo algún atraso, intentaré llamarlo más tarde."
- Procure ser más tolerante y darle su espacio a su pareja, evitando el impulso de controlarle en todo momento y preguntarle constantemente sobre lo que hace y con quién, pues de esta forma lo único que logrará es que se sienta cada vez más agobiado.
- Sentir celos de una manera leve, aunque no es recomendable, puede no suponer un gran problema, siempre que se trate de un sentimiento liviano. Sin embargo, cuando la intensidad de éstos es grande, vale la pena solicitar la ayuda de un profesional.
Psicología de Pareja
Licda. Psicología Clínica
Magister en Terapia Familiar y de Pareja (España)
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