Su nombre significa en maya antiguo "Sabana del Descanso" esto según, cuenta la leyenda que aquí era donde los viajeros se detenían a descansar en su antiguo cenote lo que hacía que se abastecieran de agua y la naturaleza les regala fruta para continuar su camino hacia lugares más lejanos.
Uno de los lugares que no te puedes perder en esta población son las grutas de Xculhoc un lugar que aún no han podido estudiar del todo, sin embargo existe la forma de apreciarlas por medio de una cámara de 10 metros de diámetro por 23 metros de profundidad.
Si lo tuyo es más caminar por el pueblito entonces no te pierdas la Iglesia y convento de San Francisco de Asís, bellísima con su piedra de cantera o la Iglesia de La Purísima Concepción, también está Iglesia de los Santos Reyes. Todos estos templos tienen sus fiestas sin embargo para la población las más importantes son en uno de los jueves por la mañana del mes de abril con la bajada del Santo Cristo de la Salud a quien se le rinde con misas. Se celebran corridas de toros por estas épocas para seguir la fiesta.
Otro lugar interesante por recorrer es el Museo Arqueológico del Camino Real de estilo colonial en donde se e exhiben figurillas mayas rescatadas de la Isla de Jaina. O tal vez te gustaría visitar un lugar como la Ex hacienda de Dzotzil, es una muestra histórica del estilo de vida colonial.
Las artesanías que puedes encontrar aquí son variadas y van desde hamacas y huaraches de piel hasta la elaboración de vestidos.
En lo que se refiere a la comida se puede disfrutar de la gastronomía de la península como la cochinita en pibil, frijol con puerco, puchero, tamales torteados y colados, papatzul, pipían, relleno negro y sanchac, además de bebidas como el pozol o el atole. Pero la especialidad del pueblo es el pan de pomuch de aspecto esponjoso y sabor dulce.
Fuente: México lindo y querido
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