Entre las nubes del día
ya no se escucha la sinfonía
del latir de tus palabras
Los pentagramas del mundo
ya no dibujan la voz de tu sonrisa
Entre las cuerdas desgarradas,
de aquella vieja guitarra,
quedaron encerradas
las notas de tu vida
La música deja paso
...
al desgarrador silencio
...
María Glez Méndez
Publicar un comentario