Los ojos parían gemidos ahogados,
Las margaritas se suicidaron...
Ni que hablar de las mariposas...
Se morían, cada vez que intentaban vivirnos.
Vestimos de amor la soledad...
Buscamos excusas para amarnos...
Pero, el amor... el amor no era de nosotros...
Fui tu piel, desahogaste tu cuerpo en mis sentimientos...
Historias de otros... Y yo, la leí con ojos lluviosos.
Beatriz Fonnegra.
Derechos Reservados
Publicar un comentario