Intentos...

Lo intenté, verdaderamente me esforcé por ser lo que tú querías, traté por todos los medios de permanecer ecuánime, pero fue en vano, hacía mucho que no te escuchaba con tanto odio en el tono de voz, sé que dirás que no es verdad, que toda la culpa es mía, que soy una estúpida como no te cansas de llamarme, y si, tienes razón, lo he sido por el amor que te he tenido, al grado de dejarme humillar por ti y seguir ahí siempre para ti.

Sé que tu verdad y la mía son muy distantes, y que no te interesa ni siquiera darte el tiempo de escucharme, para ti lo mío es soberbia, orgullo, prepotencia, y ni siquiera puedes darte cuenta que con cada palabra que gritabas ibas rompiendo de a mucho mi corazón, para ti no vale lo que intento ser, si no lo que fui, y aunque acepte que he cometido miles de errores, mis pasos a tratar de reivindicarme te son complemente invisibles.

Me quedo tranquila porque sé que nadie ha luchado por ti como he hecho yo, pero que vas a saber tú lo que es amar como yo lo he hecho, hasta dejar la piel colgada en cualquier sitio por el ardor que se siente de saberte tan lejos, que sabes de tu de pasar noches en vela, de perder la sonrisa, de hacer tantos sacrificios, de pedir tanto, de llorar tanto, prefieres negar mi verdad y ocultarla con la mentira que te creas acerca de mis sentimientos.

Ya me cansé de tratar de explicarte, de querer proponerte mil cosas para que te des cuenta de todo lo que estoy dispuesta a hacer para demostrarte mis sentimientos, este rincón para ti es una total mentira en la que me caigo a cuentos, si para ti, esa es la realidad, ya nada puedo hacer, ya no quiero hacer más, me he cansado de que sigas en el pasado cuando mi presente es complemente diferente, y es tu decisión no creer en él.

Lo intenté, de verdad, y lamento mucho como terminaron las cosas, sé que no volverás a llamar, que la responsabilidad por completo me la dejas a mi, bien, así será, como tú quieres, como siempre ha sido, bailando a tu compás, me resulta imposible comunicarme contigo, no me dejas hablar, pones sentimientos y verdades en mi que no son ciertas, y no tienes interés en entender mis razones, mis arrepentimientos, mis deseos.

Si lo que querías era venganza, por lo mucho que te lastimé, pecado que aún no termino de pagar y que aún sigo en penitencia por él, te felicito, lo lograste, no sé si eso te de la tranquilidad que deseas, no sé si con eso te llenes de satisfacción, ya no lo sabré, pero así ha sido, has destruido mi vida, mis ganas de vivir, mis sueños, mis esperanzas, lo merezco lo sé, pero aún no estoy segura de que tu merezcas todo el amor que te he dado.

BR