También es importante aprender a estar en presente, con nuestra atención en el aquí y el ahora. Es necesario evitar que la mente nos lleve a pensar con frecuencia en el pasado, haciéndonos sentir nostálgicos o afectados negativamente por algo que ya no podemos cambiar y que tenemos que superar; o a imaginar, de la peor forma, lo que puede llegar a sucedernos en el futuro. Debemos planificar el tiempo y las tareas diarias, por orden de prioridad y ocuparnos de ellas de la mejor manera posible.
Aprendamos a recargar las baterías esenciales, es decir, a fortalecer la estima y a valorarnos para no necesitar el reconocimiento de los demás, y para hacer los cambios necesarios que nos permitan recuperar el balance y la tranquilidad.
Siga estos sencillos pasos
Usar las herramientas esenciales. Fortalecer tu estima, valorar lo que haces para no necesitar el reconocimiento de los demás, ajustar tus expectativas y respetarte y quererte lo necesario para tener voluntad y determinación para realizar los cambios adecuados. Recordemos que son fortalezas esenciales que están en nuestro interior para enfrentar, manejar o resolver cada situación.
Expresarnos con confianza. Es necesario que aprendamos a expresar de la mejor manera nuestros verdaderos pensamientos y sentimientos para evitar que lo que guardamos se convierta en resentimiento, ira o dolor. Podemos recuperar y mantener nuestra salud emocional.
Vivir en presente. Aprender a vivir momento a momento nos ayudará a estar atentos para reconocer las oportunidades, los recursos y las respuestas que la vida nos ofrece constantemente. El pasado ya no lo podemos cambiar y el futuro no ha ocurrido todavía, vivamos el aquí y el ahora.
Buscar y resaltar lo positivo. Generalmente no reconocemos, valoramos o disfrutamos los elementos positivos y especiales que están presentes en nuestro entorno en todo momento. Reconoce que estás vivo aquí y ahora, respira a tu propio ritmo y sonríe.
Usar las fortalezas. Contamos con herramientas esenciales en nuestro interior para enfrentar, manejar y resolver cada situación. Eso implica tener la capacidad de volver a tu punto de equilibrio y serenidad cada vez que te sientas alterado por alguna emoción, pensamiento o circunstancia.
Bajar la velocidad. Si logramos bajar la velocidad de nuestros pensamientos y mejorar su calidad, encontraremos la tranquilidad y la serenidad que nos lleve a vivir en calma. Cuando dejamos de enjuiciar y valorar constantemente a los demás, y a todo lo que vemos, nos damos la oportunidad de estar en el presente, calmados y dedicados a disfrutar y sentir lo que nos está sucediendo. Cada instante llueven sobre nosotros infinidad de oportunidades, que podríamos perder si no estamos atentos en el aquí y el ahora.
Te invito para que conversemos en vivo, este y todos los jueves a las 9:00pm a través de mi facebook/mayttesepulveda Live, sobre "Como Mejorar y Disfrutar Nuestra Vida" Voy a responder tus comentarios en vivo. ¡Acompáñame y Avísale a tus Amigos!!
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