Un ruego a media tarde que te acariciara a mitad de tu jornada
y un beso sin destino que alcanzara a despejar la rutina y los sentidos.
Poco a poco nos fuimos vistiendo la tarde y yo, de encuentro.
Y aunque no llegásemos a estrenar el atuendo,
lo lucimos con el aire fresco de sabernos preparándonos para ello.
Poco a poco tus regresos se fueron haciendo de colores nuevos.
Y del aroma inconfundible
a nosotros.
Olga Maria Sain
©Derechos Reservados
Texto publicado con autorización de su autora
Prohibida su reproducción parcial o total sin la autorización de Olga Maria Sain
y un beso sin destino que alcanzara a despejar la rutina y los sentidos.
Poco a poco nos fuimos vistiendo la tarde y yo, de encuentro.
Y aunque no llegásemos a estrenar el atuendo,
lo lucimos con el aire fresco de sabernos preparándonos para ello.
Poco a poco tus regresos se fueron haciendo de colores nuevos.
Y del aroma inconfundible
a nosotros.
Olga Maria Sain
©Derechos Reservados
Texto publicado con autorización de su autora
Prohibida su reproducción parcial o total sin la autorización de Olga Maria Sain
Publicar un comentario
Click to see the code!
To insert emoticon you must added at least one space before the code.