Las primeras citas amorosas en adolescentes

A veces la miro a mi hija mayor, una adolescente de casi catorce años, y me viene a la memoria la canción de Julio Iglesias, "De niña a mujer". La miro con asombro, porque es una niña tratando de hallarse en esa silueta de mujer que le devuelve el espejo; la miro con ternura, porque quisiera retrasar el tiempo y que mi niña corra hacia mí con los abrazos abiertos, en lugar de salir corriendo, cuando sus amigas la vienen a buscar y escucho su "adiós" apurado. La miro con los primeros temores de mamá, frente a la hija que está descubriendo todo un universo de nuevas experiencias.

Y llegará el momento en que Cupido clave inexorablemente la flecha del primer amor en su corazón, y deseo estar preparada. Por eso, hoy te propongo pensar juntas sobre las primeras citas amorosas en adolescentes, y ver cuál es la edad indicada para que nuestras hijas comiencen a pensar en el amor.

¿Cuándo permitir las primeras citas amorosas a nuestras hijas?

Si hay algo que debemos agradecer los padres del siglo XXI es la cantidad de libros y especialistas que trabajan para poder ayudarnos con nuestras inquietudes.

Según el psicólogo David Elkind, autor de el libro The Hurried Child (El niño apresurado), las citas amorosas deben permitirse a partir de los 14 años, y basa su opinión en que considera que los niños menores de esa edad, sólo pueden emular relaciones amorosas basadas en personajes de la televisión, ya que no han desarrollado su propia personalidad por completo.

Además, antes de esa edad, aún les resulta difícil resistir la presión social, lo que les puede llevar a tomar malas decisiones con respecto al sexo, las drogas, el alcohol y la violencia.

¿Cómo saber si mi hija está preparada para tener su primera cita amorosa?

Es importante considerar que nuestra hija tenga la madurez social, emocional e intelectual acorde con su edad, lo que hará que pueda vivir su primera relación amorosa saludablemente, estableciendo un vínculo sano y sin riesgos innecesarios. Esa madurez dependerá de la relación que establezcamos con ella.

Es importante estar siempre dispuestos al diálogo cuando ella lo necesite, hablar abiertamente de lo que significa una relación de noviazgo, y si tienes la suerte que ella te plantee el tema y te pide permiso, escucharla con serenidad, antes de darle tu respuesta.

También es importante estar conectados con los padres de los amigos de nuestros hijos y conversar acerca de los parámetros que están manejando con respecto a este tema.

Si tu hija ya te pidió permiso para tener su primera salida amorosa -agradezco a Dios que ese momento a mí no me llegó todavía- pídele conocer al afortunado que la llevará a pasear y pídele que te cuente cuál es el plan de la cita.

Mientras ese momento llega, la miro y me sonrío cuando descubro que me ha "robado" una prenda de mi vestidor; la miro y me sonrío con sus enormes y hermosos ojos azulados delineados suavemente; la miro y le ordeno al tiempo que se detenga y que deje a mi hija ser mi niña unos instantes más.

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