¿Infidelidad Emocional?

Cuando hablamos de infidelidad, rápido viene a nuestra mente el hecho de que tu pareja esté teniendo una relación sexual afectiva con alguien más. Sin embargo no es la única forma en que se puede ser infiel.

La infidelidad emocional puede sonar para muchos absurda, sin embargo cada día aumentan las relaciones que sufren de este tipo de infidelidad. Algunos ejemplos en donde puede surgir este tipo de relación es: en el trabajo, la relación con el o la mejor amiga y claro actualmente las redes sociales y los mensajes.

Este tipo de infidelidad puede causar muchos daños, ya que la persona infiel no está violando los límites físicos con un tercero, pero peor aún está generando una conexión afectiva, compartiendo: confianza, amistad, atención, secretos, tiempo, cariño y poco a poco sin querer te vas alejando de tu pareja.

La manzana de la discordia suele ser un compañero de trabajo, una vieja amistad e incluso alguien de la universidad o el gimnasio. Esta situación puede empezar de forma muy inocente, como un almuerzo, reunión de trabajo y poco a poco irá más allá, creciendo la amistad, aumentando el nivel de intimidad, e incluso empiezas a compartirle cosas que ni le cuentas a tu pareja.

Si te está pasando esto, sin duda alguna ¡Estás viviendo un Affair Emocional!

Estas envuelta en esta aventura emocional y puede ser que aún ni siquiera lo consideres de esta manera, por tal motivo puede ser que lo veas como algo inofensivo que no tendrá ninguna consecuencia para tu relación, pero no es así.

¿Cómo saber si estoy cayendo en un affair emocional?

• Te has dado cuenta que constantemente piensas en este amigo, más que en tu pareja
• Cancelas actividades para poder compartir con esta persona
• Provocas encuentros con más frecuencia (salir a tomar un café o quedarse fuera del horario de oficina), para platicar
• Te aferras a tu celular esperando a que te llame o te escriba
• Cuando estas con esta persona, te molesta que tu pareja te llame
• Le cuentas cosas que ya ni le cuentas a tu pareja
• Crees que este juego de coqueteo ayudará en tu relación, porque te arreglas más o te hace sentir más segura de ti misma.

Todos estos signos son sin duda de una infidelidad emocional y después de esto aún puedes avanzar hacía un pequeño contacto físico "inocente" como un abrazo amistoso o un beso en la mejía, pero tú estás consciente que sientes mucho más que amistad porque no es esa la intención con la que los das, pero te autorizas a hacerlo, porque tratas de convencerte que no pasará a más. Luego de actuar de esta forma con esta persona, empiezas a sentir remordimiento, piensas en tu pareja y hasta te pones en su lugar y te preguntas ¿Cómo te sentirías tú si él hiciera lo mismo?

¿Qué puedo hacer para salir de esto?

El hecho de que aceptes que estás viviendo esta situación, es el primer paso, luego es importante que evalúes si tu relación está funcionando cómo debería, recuerda que en una relación es indispensable tener una buena comunicación y si estás buscando a un tercero con quién hablar algo está fallando con tu pareja. Quizás sea momento que tengas confianza de platicarle e incluso plantear la posibilidad de buscar ayuda con algún profesional que les guíe y les brinde estrategias para fortalecer su relación y comunicación, claro solo si ambos están en la disposición de hacerlo.

Si realmente deseas trabajar en tu relación deberás poner distancia y límites con tu "amigo", ya que es indispensable enfocarte en tu pareja y en los aspectos que deben trabajar dentro de su relación y evitar a toda costa la comunicación especial que mantenías con tu amigo, al principio puede ser difícil y más si es un compañero de trabajo, porque aún deberás relacionarte con él, trata que sea únicamente cuando haya un asunto importante de trabajo y evitar las llamadas, mensajes o salidas que no sean por asuntos laborales.

Te recomiendo que te apoyes en un profesional, sé que el descubrir que estás siendo infiel emocionalmente a tu pareja, no es una situación fácil de asimilar, sin embargo todo tiene solución, sólo debemos clarificar nuestra mente y el corazón.

Mónica Godínez
Psicología Clínica
Psicóloga Clínica, Fundadora de Reset Psicología Clínica, Asesora de Desarrollo Humano