Puedes jurar que no hay amor más grande ni limpio que el que tu me hiciste sentir, y que es precisamente por eso que no puedo ni quiero sacarte de mi corazón, no importa que tu insistas en seguir lejos de mi, el sentimiento existe muy dentro de mi alma y no hay poder ni humano ni divino que lo haga salir, son emociones que se viven una sola vez y que además, muy pocos podemos presumir de haber experimentado.
Puedes jurar que todas las noches me duermo abrazando una almohada mientras una lágrimas recorre mis mejillas, intentando volver a sentir la sensación de tu tibia piel sobre la gelidez de la mía que no ha logrado volver a encontrar el calor del hogar que tu me brindaste, que busca en cualquier cuerpo la tibieza de tu regazo para después sentir suciedad y culpa por haberse entregad a alguien más pensando en ti.
Puedes jurar que no hay sonrisa más sincera que la que desnudé cuando me perdí por primera vez en tu mirada, ni he dado jamás un abrazo más fuerte y considerado como el que nos sorprendió aquella noche de enero mientras el frío se colaba en nuestros huecos, y ese beso que me llevó al cielo, que tatuó su sabor en mi aliento hasta el día de hoy, y que no encuentra consuelo en ninguna otra boca, porque nada como la tersura de tus labios enamorados.
Puedes jurar que si hay alguien a tu lado que haga feliz, tiene la bendición de esta mujer tan profundamente enamorada de ti, que deseo que tu logres esa estancia maravillosa en la que me instalaste a mi, aunque no sea junto a mi, aún a costa de mi propio bienestar, aún si yo vivo en la depresión y la soledad el resto de mi vida, quiero tener la tranquilidad que tu estás bien, amor mío, que tu si lograste llegar a ese edén que un día me prometiste…
BR
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